La causa social: el alma de tu proyecto político.

En un municipio muy lejano una mañana de abril, María Castillo decidió que quería postularse para ser presidenta municipal.

Estaba determina a lograrlo, aunque no militaba en ningún partido, no contaba con recursos financieros para llevar a cabo su campaña, no tenía un grupo de personas que siguieran sus indicaciones, no tenía relaciones con los medios de comunicación, no tenía amigos que hubieran participado antes en la política, no contaba con asesoría y tampoco tenía experiencia en el ámbito de la administración pública.

Bajo este panorama todo parecía estar en contra de María Castillo, sin embargo, ella tenía lo que le hacía falta a quienes se convertirían en sus adversarios electorales.

María Castillo tenía un propósito, tenía una causa, tenía la respuesta al ¿Por qué quería ser presidenta municipal?

El municipio en donde María Castillo vivía, siempre tenía problemas de abastecimiento de agua. Por años, ningún gobierno se había encargado del problema, había en el municipio sistemas de agua colapsados, inconclusos e inexistentes.

María Castillo nació en una comunidad en donde, para obtener agua, debía caminar todos los días muchos kilómetros hasta el río y cargar apenas cuarenta litros en un burro para llevar el líquido a su familia, esta agua servía para todo y para todos, desde asearse, cocinar y hasta beber de ella.

Cuando María Castillo le dijo a su familia que quería ser presidenta municipal su esposo le preguntó -¿Por qué quieres ser presidenta?-, la respuesta de María fue simple -Quiero que el agua deje de ser un problema en nuestra comunidad y en nuestro municipio-

Cuando María Castillo corrió la voz entre sus familiares, amigos y vecinos, muchos estaban escépticos de que pudiera lograr ganar las elecciones, pero también, muchos se mostraron interesados en el propósito de María; y no pasó mucho tiempo para que María contara con un ejército de personas dispuestas a ayudarla a ganar, quienes le decían -sabemos que tu si conoces lo que es sufrir el problema del agua y por eso estamos seguros que cuando seas presidenta no nos decepcionaras-

La fuerza del grupo de seguidores de María Castillo era muy grande y enérgica. Pronto aparecieron personas interesadas en financiar su causa, en aportar ideas, dinero, recursos humanos y su propio tiempo para luchar por el propósito de María Castillo.

En todos sus discursos María platicaba a la gente como era vivir con el problema del agua y cada vez que terminaba un discurso se escucha un grito de ella acompañado de la voz de toda la gente que la seguía, que decía -¡PRIMERO EL AGUA!-

María Castillo ganó las elecciones y su gobierno marcó la diferencia para los ciudadanos de ese municipio. Después de su muerte, María Castillo es recordada todavía como la presidenta del agua.

Escrito por:

Christian Perales

Asesor Político

Facebook y twitter: peralesja

Publicado en: www.estartegma.com